Según el estudio de Cambridge Press y The Society, titulado "El Covidien-19 & la deficiencia de la Vitamina D": "La suplementación con vitamina D, tiene un efecto preventivo contra las infecciones agudas" Según el estudio de Nutrientes, titulado El estado nutricional óptimo para un sistema inmunitario que funciona bien es un factor importante para proteger contra las infecciones virales: "Las vitaminas C y D, el zinc y un ácido raso de omega-3 (docosahexaenoico, DHA), que se encuentra en el pescado, el ácido ocosahexaenoico, son críticos para que funcione el sistema inmunitario del organismo humano" Según el estudio de dermato-Endocrinology, titulado La Luz del sol y la vitamina D, una perspectiva global para la salud. "Se debe implementar una estrategia en tres partes de incrementar los programas de fortificación de alimentos con vitamina D, recomendaciones de exposición solar sensibles y fomentar la ingestión de un suplemento de vitamina D cuando sea necesario para evitar la deficiencia global de vitamina D y sus consecuencias negativas para la salud. " El sistema inmunitario está altamente relacionado con las infecciones que las personas contraemos, como más fortalecido este nuestro sistema inmune, menos probabilidades tendremos de contraer enfermedades. Esto no significa que aunque nuestra dieta sea equilibrada, estemos suplementando seleccionados y tomando sol para sintetizar la vitamina D, estemos exentos de contraer el coronavirus. El coronavirus, tiene una alta propagación y el factor decisivo de su disponerlo no es el nivel óptimo de las vitaminas, hay muchas otras variables y todavía se están realizando estudios para disponer de toda la información. Aun así, es importante conocer la importancia de las vitaminas, ayudan al organismo y nos pueden ayudar a prevenir infecciones o dejar de tener síntomas tan habituales como por ejemplo el cansancio.
Las vitaminas son
sustancias que se encuentran en pequeñas cantidades en los alimentos y resultan
indispensables para el correcto funcionamiento del organismo.
Las liposolubles,
se disuelven en lípidos y grasas. Son las vitaminas A, E, D y K.
Las hidrosolubles,
se disuelven en agua. Son las vitaminas C, B1, B2, B3, B6 y B12.
Cansancio,
relacionado con la vitamina B12
Infecciones agudas,
relacionado con la vitamina D
Sequedad ocular, relacionado
con la vitamina A
Caída del cabello o
dermatitis, relacionado con la Biotina
Sangrado de *
encias, relacionado con la vitamina
* Son síntomas
habituales relacionados, no implica una evidencia directa.
Puede haber otros
motivos por los que una persona tenga esta sintomatología.
¿Por qué la
vitamina D, aumenta la acción de las células del sistema inmunitario que se
localizan en los tejidos, llamados macrófagos. Este hecho permite que nuestro
cuerpo:
Sean capaces de
atacar las bacterias y virus, ya que engloban los microorganismos y los
destruyen. Este proceso se conoce como fagocitosis.
1. Lávese las manos
frecuentemente
Lavarse las manos es
la medida más eficaz para reducir la transmisión de infecciones.
Cuando hay que
lavarse las manos?
Antes y después de
ir al baño.
Tras sonarse, toser
o estornudar.
Al llegar a casa
después de salir a la calle.
Antes de preparar o
comer cualquier alimento.
Después de tocar
alimentos crudos.
Cada vez que
manipulamos basura, dinero, cartones, etc.
Cuando tocamos
animales y alimentos para animales.
Después de tocar
barandillas de escaleras públicas o las barras del transporte público.
Tras el contacto
directo con personas enfermas o su entorno.
Y siempre que las
manos están sucias.
Las manos se deben
lavar con agua tibia y jabón, preferiblemente líquido y con pH neutro (o con
soluciones alcohólicas 70%), hasta la altura de las muñecas, con movimientos de
fricción y rotación. Hay que frotar bien palma contra palma y poner la palma de
la mano derecha sobre el dorso de la izquierda y viceversa. Se deben entrelazar
los dedos, para limpiar bien los espacios que hay entre ellos, y lavar el dorso
de los dedos contra la palma opuesta con los dedos trabados. A continuación y
con movimientos rotatorios, hay que frotar bien los pulgares mediante la mano
contraria y, posteriormente, las puntas de los dedos de una mano sobre la palma
de la otra mano, haciendo especial énfasis en las uñas. Finalmente, hay que
enjuagar las manos bajo el chorro de agua y secarlas con una toalla limpia, un
papel de un solo uso o un secador.
Otras pautas para
una correcta higiene de las manos incluyen quitarse las joyas (relojes, anillos
y brazaletes) previamente porque pueden interferir en el lavado, mantener las
uñas cortas para evitar la acumulación de gérmenes abajo, y prevenir la
irritación de la piel para evitar la colonización de bacterias no habituales
mediante medidas como el uso de agua tibia (no caliente) o la aplicación de
lociones y cremas.
2. Tápese la boca y
la nariz al toser o estornudar
Hay que hacerlo con
pañuelos desechables o con la cara interna del codo y lavarse las manos
enseguida (con agua y jabón o con soluciones alcohólicas 70%).
3. Mantenga la
distancia de seguridad con otras personas
Respete la distancia
física personal de seguridad de 1,5 metros, tanto en espacios cerrados como al
aire libre, con aquellas personas con las que no convive, aunque sean
familiares o amigos.
Evite espacios
concurridos, donde sea difícil mantener la distancia interpersonal y se puedan
producir aglomeraciones.
4. Póngase las
mascarilla
El uso de las
mascarilla es obligatorio para todas las personas de 6 años en adelante, en la
vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso
público, independientemente del mantenimiento de la distancia física
interpersonal de seguridad.
Quedan exentas de
esta obligación las personas que presenten algún tipo de enfermedad o
dificultad respiratoria que pueda verse agravada por la utilización de la
mascarilla o que, por su situación de discapacidad o dependencia, no dispongan
de autonomía para quitársela la o bien presenten alteraciones de conducta que
hagan inviable su uso.
5. Evite compartir
comida y utensilios
El coronavirus SARS-CoV-2 puede sobrevivir fuera del cuerpo humano, en la
superficie de determinados objetos. Por lo tanto, es muy importante que no
comparta utensilios, bebida ni comida con ninguna persona con quien no convive,
aunque sea un familiar o amigo. Evita: Beber del mismo vaso que otras personas.
Compartir una tapa o cualquier otro plato. Comida con los mismos cubiertos.
Usar el mismo servilleta. Utilizar el mismo pañuelo. Secarse las manos, el
cuerpo o el pelo con la misma toalla. Compartir juguetes. Dejar el móvil o la
tableta a otras personas. Utilizar el mismo ordenador. Intercambiar ropa.
Compartir la ropa de cama. 6. Evite tocarse la boca, la nariz y los ojos sin
lavarse antes las manos Evite hacerlo especialmente después de tocar o
manipular objetos que otras personas pueden tocar o manipular, tales como
manijas de puertas y expositores, pantallas, teclados para el pago, botones de
los ascensores, dinero, etc. 7. Limite la vida social Mantenga los grupos de
convivencia habitual lo más estables posible y procure reducir los contactos
sociales diarios para evitar la multiplicación de posibles cadenas de
transmisión, y opta preferiblemente por los espacios al aire libre a la hora de
hacer encuentros. Si celebráis reuniones familiares y actividades sociales,
hágalo preferentemente con las personas con las que mantenga una relación y un
contacto cercanos de forma muy habitual y, si es posible, al aire libre. Evite
generar aglomeraciones y respetar tanto las limitaciones en el aforo que se
establezcan como las normas de protección individual. 8. Limpiar y desinfectar
el hogar Limpiar diariamente, utilizando agua y jabón, es fundamental para
eliminar la suciedad y la materia orgánica de las superficies y arrastrar los
microorganismos que puedan haber.
Hay que incide
especialmente en las zonas, puntos y objetos más comunes donde puede haber
mayor riesgo de contacto con las manos: muebles, pomos de las puertas y de
armarios, sillas o sillones, lámparas, el inodoro, los grifos, los
interruptores , u objetos como teléfonos, ordenadores o mandos a distancia.
Conviene que
desinfecte después de limpiar para evitar que la suciedad interfiera con los
desinfectantes y minimice la eficacia. Puede emplear lejía, alcohol etílico
entre el 62-71%, peróxido de hidrógeno al 0,5%, u otros productos
desinfectantes con finalidad viricida autorizados para uso público en general y
uso ambiental.
También es
importante que ventile diariamente todas las habitaciones y espacios de las
viviendas durante 30 minutos al día como mínimo.
9. Ventilar a
menudo los espacios cerrados
La ventilación es
clave para evitar la concentración del virus en un espacio cerrado.
Se ha demostrado
que el riesgo de contagio del coronavirus en el interior de los edificios es
más elevado que en el exterior.
Por lo tanto, es
importante ventilar al máximo posible los espacios cerrados para favorecer una
renovación de aire suficiente, así como realizar al aire libre aquellas
actividades que lo permitan.
Opte, siempre que
sea posible para mantener abiertas puertas y ventanas. Para que la ventilación
sea efectiva, conviene abrir ventanas o puertas que se encuentren opuestas
entre sí, para que corra el aire.
Si recibe visitas
en casa, procure ventilar bien los espacios compartidos antes, durante y
después de la visita. Recuerde, también, mantener los aseos bien ventilados.
Si dispone de
sistemas de ventilación y climatización, mantenga la máxima aportación posible
de aire exterior. Si estos sistemas son descentralizados y, por tanto, que sólo
hacen circular el aire interior, complementarlos con ventilación natural
abriendo ventanas y puertas, o haga su uso a velocidades de ventilador bajas.
Es necesario que los equipos estén en un buen estado de mantenimiento.
La ventilación, sin
embargo, no sustituye las otras medidas para evitar contagios: mantenimiento de
la distancia entre personas, el uso de mascarillas y la limpieza y desinfección
de las manos y superficies.
10. Evalúe su
exposición diaria a la Covidien-19
Cada actividad que
hacemos en sociedad conlleva un nivel de exposición al contagio de la
Covidien-19. Hemos hecho una aproximación para ayudarle a evaluar teniendo en
cuenta algunos factores clave:
El tiempo que dura
la actividad: cuanto menos tiempo dura, menos nivel de exposición.
Si está en el interior o al aire libre: las actividades en el exterior y en espacios con buena ventilación hacen más difícil la posibilidad de contagio.
El número de
personas que participan: la acumulación de personas aumenta la posibilidad de
que el virus esté presente. Además, es importante que en espacios muy
concurridos, haya el mínimo de personas con riesgo de sufrir complicaciones por
la Covidien-19.
Mejor personas
conocidas: aunque no es recomendable reunirse con demasiadas personas al mismo
tiempo, es más seguro si no son desconocidas.
La fuerza con que
exhalamos o el tono de voz que usamos: cuando las personas que nos rodean
respiran fuerte (para hacer un esfuerzo, para proyectar la voz o por exhalar
humo del tabaco), tenemos más posibilidades de ser contagiados.
Por todo ello, le
recomendamos que exija que se cumplan las medidas de seguridad en todos los
entornos donde se mueve. No es lo mismo un acto público con distancia y
mascarillas que uno donde esto no se respeta. Y, como siempre: lávese las manos
a menudo y limite los contactos sociales a los miembros de su grupo estable.
11. Y si tiene
síntomas ...
Ante la aparición
de síntomas como fiebre, tos, sensación de falta de aire, malestar general,
diarreas o vómitos:
La detección precoz
y el seguimiento de los casos positivos y de sus contactos es clave para
mantener el control de la epidemia. Por eso es importante que las personas que
presenten síntomas compatibles con la Covidien-19 contacten con el sistema
público de salud, reporten las personas con las que han tenido contacto
estrecho y sigan las indicaciones de los profesionales sanitarios.
BIBLIOGRAFÍA:
https://www.ecoceutics.com/ca/respostes-de-salut/vitaminas-coronavirus/